Opina en directo sobre el «cambio físico» de Tamara Falcó.
La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva está cada vez más cerca y también más envuelta en controversia. La pareja, que anunció su compromiso el pasado septiembre y lo reafirmó en enero tras una breve ruptura, ha fijado la fecha de su enlace para el 17 de junio en la finca El Rincón, propiedad de la familia Falcó. Sin embargo, no todo ha sido un camino de rosas para los futuros esposos, que han tenido que hacer frente a varios problemas relacionados con el vestido de novia de la marquesa de Griñón.
Tamara Falcó había elegido inicialmente a la firma vasca Sophie et Voilà para diseñar su traje nupcial, pero el acuerdo se rompió por supuestas diferencias creativas entre la socialité y las responsables de la marca, Sofía Arribas y Saioa Goitia. Según ellas, Falcó les exigía realizar un diseño que se parecía demasiado a otro ajeno a su firma y que no se ajustaba a su estilo.
Además, una testigo de las pruebas del vestido aseguró que la hija de Isabel Preysler habría cobrado 150.000 euros por lucir el modelo de Sophie et Voilà, algo que no ha sido confirmado ni desmentido por ninguna de las partes. Pero la versión oficial de la ruptura entre Tamara Falcó y las diseñadoras vascas podría ocultar otro motivo más delicado: el aumento de peso de la novia.
«Vomitivo».
Así lo ha revelado Alessandro Lequio en ‘El programa de Ana Rosa’, donde ha afirmado que Falcó no se sentía cómoda con el vestido que le habían propuesto porque quería disimular sus kilos de más. El colaborador italiano ha sido muy crítico con el físico de la marquesa y ha comparado su perímetro con el de su madre, mucho más delgado. También ha insinuado que el sobrepeso es un problema generalizado en los países mediterráneos y ha citado a la reina Letizia como ejemplo de una persona preocupada por su salud.
«Si repasamos la foto de este fin de semana, vemos como el perímetro de Tamara es el doble del de su madre. Eso tiene repercusión en la elección del traje de novia, ya que ella muy a disgusto con sus formas», dijo el colaborador ante el estupor de los espectadores. «No soy precisamente fan de Tamara Falcó, me parece una repipi inaguantable, pero de ahí a meterse con su físico», dijo un tuitero al respecto. «Vomitivo y deleznable» fue el lapidario comentario de otro.
Lequio no ha sido el único que ha opinado sobre el aspecto de Tamara Falcó. Su compañera Bibiana Fernández también ha hecho unos comentarios poco afortunados sobre la novia, diciendo que había cogido peso y que se podía vestir de trapecista. Además, ha señalado que Wes Gordon, el diseñador creativo de Carolina Herrera, la firma que finalmente se encargará del vestido de Falcó, se va a encontrar con una mujer distinta a la que vio en el reality donde ella le visitó.
Ante estas críticas, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han preferido mantenerse al margen y disfrutar de su amor. La pareja ha realizado varios viajes románticos en los últimos meses, como a Finlandia o a Praga, donde Onieva le pidió matrimonio por segunda vez con un nuevo anillo. Los novios también han lanzado una página web para sus invitados con todos los detalles de la boda y un vídeo donde se ve el lugar de la celebración. A pesar de los contratiempos, Tamara Falcó e Íñigo Onieva están decididos a darse el ‘sí quiero’ y vivir felices para siempre.