Enrique Ponce y Ana Soria, una nueva vida en la finca Cetrina
La finca Cetrina es mucho más que una propiedad para Enrique Ponce. Es el símbolo de su triunfo como torero, el escenario de su amor con Paloma Cuevas y el hogar de sus dos hijas. Situada en Navas de San Juan (Jaén), esta impresionante finca cuenta con 900 hectáreas de terreno, una casa de 1.200 metros cuadrados, una réplica de la puerta de la Maestranza de Sevilla, una plaza de toros, una piscina, una capilla, varios pabellones de entrenamiento, olivos, ganado vacuno y hasta toros bravos y sementales. Es, sin duda, una joya inmobiliaria con mucha historia.
Pero esa historia ha cambiado desde que Enrique Ponce se divorciara de Paloma Cuevas en 2021 y comenzara una nueva vida con Ana Soria, una joven almeriense que le ha devuelto la ilusión. La pareja se conoció por Instagram en 2018 y dos años después hizo pública su relación, que causó un gran revuelo mediático. A pesar de las críticas y los comentarios, Enrique y Ana siguen felices y enamorados, y han encontrado en la finca Cetrina su refugio.
La finca Cetrina, un lugar para celebrar el amor
Enrique Ponce está tan orgulloso de su finca Cetrina que ha decidido compartirla con otras parejas que quieran celebrar su boda en un lugar único y especial. El torero ha puesto en alquiler su finca para eventos puntuales, y ya son varias las bodas que se han celebrado allí con gran éxito. Los novios que han elegido Cetrina han quedado encantados con los espacios, la decoración, el servicio y el entorno de la finca, y han dejado reseñas muy positivas.
«Sin duda alguna Cetrina es la finca más impresionante que hemos visto», «el mejor sitio del mundo para celebrar una boda», «una auténtica locura», son algunos de los comentarios que se pueden leer en las redes sociales de los afortunados que han disfrutado de Cetrina. Enrique Ponce y Ana Soria han sabido sacarle partido a su finca, y han formado un equipo profesional que se encarga de organizar todo al detalle.
La finca Cetrina, un lugar para disfrutar de la amistad
Pero la finca Cetrina no solo es un lugar para el amor, sino también para la amistad. Enrique Ponce y Ana Soria suelen pasar fines de semana en la finca, donde reciben la visita de sus amigos, tanto los de él como los de ella. Aunque hay una diferencia de edad de más de 20 años entre la pareja, eso no parece ser un obstáculo para que se lleven bien con sus respectivos círculos.
En la finca Cetrina han pasado momentos inolvidables personas como Genoveva Casanova, Luis Miguel, Adriana Carolina Herrera o El Litri, entre otras. Antes, cuando Enrique Ponce estaba casado con Paloma Cuevas, la discreción era la norma, y nadie en el pueblo sabía quién había estado en la finca. Ahora, sin embargo, todo es más sencillo y cercano, y no es extraño ver a gente joven comprar para hacer barbacoa o tomar algo en el pueblo.
La finca Cetrina, un lugar para cambiar de vida y «borrar» a Paloma Cuevas para siempre
La finca Cetrina ha sido testigo de los cambios que ha experimentado Enrique Ponce desde que se separara de Paloma Cuevas y se enamorara de Ana Soria. El torero ha pasado de una vida familiar y tranquila a una vida más aventurera y pasional. También ha cambiado de residencia, y se ha mudado a Almería, donde vive con su novia y la familia de esta. Además, ha renovado su imagen, su estilo y su actitud, y se le ve más feliz que nunca.
Pero no todo ha sido fácil para Enrique Ponce y Ana Soria. Su relación ha sido objeto de muchas críticas y rumores, y han tenido que soportar la presión mediática y social. El torero ha defendido a su novia en varias ocasiones, y ha declarado que está «enamorado locamente» de ella, y que le admira por su fortaleza y su bondad. También ha dicho que se quiere casar con ella, aunque todavía no hay fecha ni lugar.
Lo que sí hay es un lugar donde celebrar su amor y su amistad, y ese es la finca Cetrina. Un lugar que ha visto crecer y cambiar a Enrique Ponce, y que sigue siendo su emblema y su orgullo. Un lugar que, quizá, algún día sea también el escenario de su boda con Ana Soria.