Trabajar en un restaurante genera historias de clientes satisfechos y otros muy exigentes o muy desagradecidos… Y es que hay una línea que diferencia un pedido “especial” de uno sin sentido, y esto genera una serie de sucesos que podrían resultar muy graciosos en muchos casos.
Aquí tenéis anécdotas que nos han contado trabajadores sobre pedidos y clientes que parecían venidos de otro planeta.