Un bar en Palencia que prohíbe la entrada a los del pueblo y hay una explicación

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Un incendio, una denuncia por intento de homicidio y un cartel que lo cambia todo en un bar de Palencia

«PROHIBIDO ENTRAR GENTE DE ESTE PUEBLO». No es una broma ni una campaña viral, es el cartel real que cuelga en la entrada del Bar Arrabal, en la localidad palentina de Población de Campos. Una decisión drástica, cargada de impotencia y miedo, que ha generado sorpresa, indignación y preguntas sin respuesta en este pequeño municipio del Camino de Santiago.

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Un fuego que lo cambió todo

Hace unas semanas, un incendio nocturno destrozó un coche y el mobiliario urbano de la terraza del bar. Justo encima del establecimiento, dormían sus propietarios. El vehículo era de Guillermo Gómez, pareja de la dueña del local, y para él no hay duda de lo que ocurrió: fue un ataque intencionado.

“Empezó en el mobiliario de la terraza y fue intencionado. Así se lo he dicho a la Guardia Civil y ellos lo saben también. Y la persona que lo ha hecho es de este pueblo porque saben que ese coche es el mío.”

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Guillermo relata que el fuego se inició con un líquido inflamable: “hay un reguero hacia el vehículo”, lo que alimenta la sospecha de una agresión premeditada.

Denuncia por intento de homicidio

Convencido de que alguien quería hacerles daño, Guillermo ha presentado una denuncia por intento de homicidio en el cuartel de la Guardia Civil de Frómista. En declaraciones a la Cadena SER, añade con contundencia:

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“Sí han pasado cosas con gente de aquí, pero eso no te lo puedo contar. Lo sabe la Guardia Civil y quieren que no digamos nada porque cuanto menos lo movamos, mejor darán con todo ello.”

La investigación continúa, aunque por ahora sin avances públicos. El alcalde del municipio, Miguel Ángel Ramos, ha declarado que desconoce si el incendio fue intencionado o no, manteniéndose prudente ante la gravedad de los hechos.

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Un cartel de ruptura: “Aquí ya no entra nadie del pueblo”

La respuesta de Guillermo y su pareja no ha tardado en llegar. Como muestra de su rechazo y temor, han colocado en la entrada del bar un cartel tan inusual como categórico:

“PROHIBIDO ENTRAR GENTE DE ESTE PUEBLO”

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Una decisión que ha dejado a muchos vecinos entre ofendidos y desconcertados. Sin embargo, para la pareja es una cuestión de seguridad y principios. Sienten que han sido atacados por alguien del entorno, y hasta que todo se aclare, no quieren trato con nadie del pueblo.

¿Y ahora de qué vivirán?

La gran pregunta que muchos se hacen es evidente: ¿cómo piensan sacar adelante el negocio sin contar con la clientela local? Guillermo responde sin dudar:

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“De los peregrinos.”

Y es que Población de Campos es una localidad de paso del Camino de Santiago, con una afluencia constante de caminantes durante buena parte del año. Para el Bar Arrabal, los peregrinos podrían convertirse en su único sustento, al menos mientras dure este clima de tensión.

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Un pueblo dividido y en silencio

Lo ocurrido ha destapado una fractura social en el pueblo. Aunque oficialmente no hay acusaciones directas ni responsables identificados, el ambiente es tenso. El silencio se impone, quizá por miedo, quizá por prudencia.

El cartel seguirá en la puerta del bar, al menos de momento. Como símbolo de hartazgo, desconfianza y dolor. Y mientras tanto, la Guardia

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