Multas a Mercadona por acoso laboral a dos empleadas
La empresa de supermercados Mercadona ha sido multada con 7.501 euros por vulnerar los derechos de dos de sus trabajadoras en el establecimiento de Burlada, en Navarra. Las empleadas denunciaron que sufrían una situación humillante y de acoso por parte de la coordinadora del centro, que les amenazaba, descalificaba y presionaba constantemente. Esto les provocó periodos prolongados de baja por ansiedad.
La denuncia fue presentada por el sindicato ELA (Euskal Sindikatura) y ‘Bildelagun Fundazioa’, que asesoraron a las afectadas. La Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Navarra comprobó la veracidad de los hechos y levantó un acta en diciembre de 2022, considerando que se trataba de una infracción en materia laboral. El Gobierno de Navarra, encargado de establecer la sanción, también lo ha entendido así y ha impuesto una indemnización por daños morales y la extinción del contrato de una de las empleadas.
Testimonios de otros trabajadores que corroboran el acoso
Para llegar a esta conclusión, la Inspección de Trabajo entrevistó a otros trabajadores del supermercado, que confirmaron el mal trato que recibían por parte de la coordinadora. Todos ellos coincidieron en señalar su carácter hostil, sus formas inadecuadas, sus broncas constantes, sus malas caras y sus amenazas de despido. Además, indicaron que cuando planteaban la situación a Recursos Humanos, la respuesta era que arreglaran los papeles para irse de la empresa.
Los inspectores también observaron que después de las entrevistas, los trabajadores fueron llamados por la coordinadora y la abogada de Mercadona, lo que evidencia la gran presión que ejercen sobre la plantilla.
Asimismo, constataron que una de las denunciantes tenía una situación especial por motivos de salud y cumplía una jornada reducida por guarda legal, pero que la coordinadora le cambiaba los horarios y le asignaba tareas no recomendadas por el médico. También le reprochaba su ausencia al trabajo cuando tenía justificantes médicos o personales, e incluso le prohibía ir al baño o hablar con sus compañeros.
La coordinadora niega el acoso y Mercadona recurre la sanción
La coordinadora del supermercado negó ante la Inspección de Trabajo que hubiera o haya una actitud de acoso por su parte hacia ningún trabajador. Alegó que es una persona seria de carácter y que no tiene que ir repartiendo sonrisas. También dijo que los cambios de horario se debían a las necesidades del servicio y que las broncas eran por el incumplimiento de las normas.
Sin embargo, estas alegaciones no fueron suficientes para evitar la sanción, que Mercadona ha recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra. La empresa argumenta que no hay pruebas suficientes para demostrar el acoso laboral y que se trata de un conflicto personal entre las trabajadoras y la coordinadora.