Un crimen sin resolver
Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, está acusado de matar al médico colombiano Edwin Arrieta en Tailandia. La policía cree que se trata de un asesinato premeditado que podría llevarlo a la pena de muerte. Sin embargo, el caso está lleno de incógnitas y contradicciones que ponen en duda la versión oficial.
La prueba clave: ¿real o falsa?
La principal evidencia que sostiene la acusación es un video de seguridad de un supermercado, donde supuestamente se ve a Daniel comprando cuchillos y otros objetos que habría usado para cometer el crimen. Pero el video es de mala calidad y no permite identificar claramente al comprador. Por eso, ha surgido la teoría del doble, que sostiene que se trata de otra persona parecida a Daniel.
La teoría del doble: ¿una coartada o una conspiración?
Los defensores de la teoría del doble argumentan que el hombre que aparece en el video no tiene las mismas características físicas que Daniel, como el pelo o la estatura. Además, cuestionan por qué la policía no ha revelado la causa de la muerte de Arrieta ni ha hecho públicos los resultados de la autopsia. La portavoz de la familia Sancho, Carmen Balfagón, también ha expresado su escepticismo sobre el caso: “Hay muchas cosas que tenemos que saber y no sabemos. Hay un tema muy oscuro y muy turbio”.
La condena: ¿justicia o venganza?
Si Daniel Sancho fuera declarado culpable de asesinato premeditado, se enfrentaría a la pena de muerte en Tailandia. Esta es la máxima sanción que contempla el código penal tailandés para los casos de homicidio intencional. Sin embargo, la aplicación de la pena capital es muy controvertida y ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones de derechos humanos.