Trágico suceso.
Algunas tragedias son particularmente impactantes. Los fallecimientos por causas naturales, como la avanzada edad del finado, son más fáciles de racionalizar. Sin embargo, hay casos en los que el drama se acentúa por factores como la muerte de una persona tan querida como Eva García.
La muerte de Eva García, una gijonesa de 46 años, ha conmocionado a la sociedad asturiana y especialmente a su entorno más cercano. Se trata de una de esas tragedias que cuesta asimilar, pues se produjo de forma súbita e inesperada cuando la víctima se encontraba disfrutando de unas vacaciones familiares en Huelva.
Eva García era una mujer muy apreciada por su labor profesional en la empresa Orange y por su dedicación a su familia, formada por su marido, Javier Gómez Mendoza, decano del Colegio de los Procuradores de Gijón, y su hija, Carolina Gómez García.
Así sucedieron los hechos.
Según fuentes cercanas a la familia, Eva García Pérez sufrió un ictus el pasado viernes por la mañana cuando se hallaba en el hotel donde se alojaba junto a su marido y su hija. Fue trasladada de urgencia al hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, donde ingresó en estado crítico y falleció horas después sin que los médicos pudieran hacer nada por salvar su vida. La noticia causó una gran consternación entre sus compañeros y amigos, que la describieron como “una persona muy querida, trabajadora y entregada, siempre volcada en su familia”.
El cuerpo sin vida de Eva García Pérez fue trasladado el sábado al tanatorio de Cabueñes, en Gijón, donde se instaló la capilla ardiente. Allí acudieron numerosas personas a dar el último adiós a la fallecida y a mostrar su apoyo y condolencias a la familia. El domingo por la tarde se celebró una ceremonia religiosa en el propio tanatorio, presidida por el párroco del Corazón de María, José Luis González Vázquez. El funeral tuvo lugar el lunes, a las seis de la tarde, en la iglesia parroquial del Corazón de María.
Eva García Pérez era hija de Eradio García Fernández y Menchu Pérez Álvarez, ambos fallecidos hace unos años. Tenía un hermano menor, Héctor García Pérez, que reside en Madrid. Era licenciada en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales por la Universidad Autónoma de Madrid, donde había publicado varios trabajos académicos sobre gentrificación, política urbana y desigualdad social. También había trabajado como auxiliar administrativo en el Ayuntamiento de Alicante y como tripulante de cabina en varias compañías aéreas. Desde hace unos años trabajaba como responsable de atención al cliente en Orange, donde era muy valorada por sus compañeros y superiores.
Eva García Pérez deja un gran vacío entre todos los que la conocieron y la quisieron. Su pérdida ha sido un duro golpe para su marido, Javier Gómez Mendoza, que lleva más de 20 años al frente del Colegio de los Procuradores de Gijón y que es una figura muy respetada en el ámbito jurídico asturiano. También para su hija, Carolina Gómez García, una joven estudiante de Psicología que tenía una estrecha relación con su madre. Y para todos sus familiares, amigos y compañeros, que la recordarán siempre como una mujer ejemplar, generosa y vitalista.