Solo hay diez en todo el mundo.
En todo el mundo, hay un automóvil que es prácticamente inalcanzable para el 99.9% de las personas: el Bugatti Centodieci. Este supercoche de dos plazas tiene un precio de 8 millones de euros, sin incluir los impuestos, y solo hay diez unidades en todo el planeta. De hecho, la unidad número 7 pertenece exclusivamente a Cristiano Ronaldo, quien la solicitó personalmente.
Hace unos días, el jugador portugués fue visto en Madrid conduciendo su Bugatti Centodieci color blanco cuarzo con una potencia de 1.600 caballos. Aunque no pudo conducir a velocidades de hasta 300 kilómetros por hora en las calles de La Castellana, su presencia no pasó desapercibida para los aficionados, muchos de los cuales se acercaron para hacerse fotos con él y su coche.
Ronaldo siempre ha tenido una conexión especial con la ciudad de Madrid, donde vivió durante muchos años mientras jugaba para el Real Madrid. De hecho, incluso después de mudarse al Al-Nassr, sigue visitando la capital española de vez en cuando. Aunque se han especulado sobre un posible regreso al Real Madrid, estos rumores no se han confirmado.
Es interesante notar que, aunque el Bugatti Centodieci es uno de los coches más caros del mundo, no es el más costoso producido por Bugatti. Ese honor recae en el Bugatti Voiture Noire, una edición limitada que se vende por unos asombrosos 15 millones de euros.
El percance cuando lo conducía su escolta.
Después de su breve estancia en Madrid, Ronaldo regresó a Arabia para unirse a su equipo, el Al-Nassr. Pero antes de partir, él y su equipo disfrutaron de una cena en uno de los restaurantes más populares de la ciudad. A pesar de que Ronaldo no pudo llevar su coche al restaurante, uno de sus escoltas tuvo la suerte de poder manejar el Bugatti Centodieci por un corto tiempo.
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Desafortunadamente, debido a la irregularidad del pavimento, el escolta rozó los bajos del coche contra el suelo, causando un ruido que dejó a los aficionados preocupados. A pesar de este percance menor, el coche sigue siendo una de las posesiones más valiosas de Ronaldo y una joya en la corona de la marca Bugatti.