Suele pensarse que las personas se llevan mal con los padres de sus parejas. Se ha convertido en un cliché: los esposos se llevan mal con las suegras, a las esposas no les agradan mucho sus suegras, etcétera.
Pero en realidad, la madre del marido puede llegar a ser una mujer maravillosa. Incluso llegar a convertirse en algo así como una segunda madre para su nuera.
“Mi esposo y yo nos enfermamos y no pudimos salir a la tienda, así que su mamá nos trajo un montón de comida”
“Mi suegra compró una cama antiestrés para nuestro gato”
“La mamá de mi esposo puso una mesa de verdad para alimentar a los venados. ¡Qué lindo!”
“Mi segunda mamá me regaló sus orquídeas”
“¡Mi suegra nos compró bolsas iguales!”
“La mamá de mi esposo me tomó esta foto con mi amigo de cuatro patas”
“Mi suegra me enseñó a hacer artesanías. Este es uno de mi primeros proyectos”
“La mamá de mi esposo me regaló el anillo de su madre y me permitió modificarlo a mi gusto. Esto fue lo que hice”
“¡Mi segunda mamá tejió un pequeño sillón para nuestro gato!”
“Mi futura suegra me regaló un collar maravilloso de oro para que me lo pusiera el día de la boda. Su bisabuelo hizo esta joya con sus propias manos”
“La abuela cosió y dibujó un cojín para la recámara de mi hijo”
“¡Que todas tengan una suegra así!”
“Pronto daré a luz a una niña. Tejí un vestido para ella, y el gorrito fue hecho por su futura abuela”
“La mamá de mi esposo me regaló un gatito para mi cumpleaños. Vamos a la clínica veterinaria, pronto sabremos si es niño o niña”
“Simplemente quería mostrar qué cobija tan maravillosa cosió la abuela para su nieto”
“Solamente le dije a la mamá de mi esposo que para esta Navidad quería algún cosmético de una marca muy buena”
“Mi suegra tiene un buen sentido del humor. Al regresar a casa, encontramos esto en el cuarto de baño”
Y tú, ¿qué tal relación tienes con tu suegra?