Es increíble como tantos y tantos inventos que se han hecho a lo largo de la historia surgieron de la más pura casualidad o de ensayar una y otra vez hasta que salió… Recordemos al menos a Newton y la ley de la gravitación universal.
En este artículo os mostramos esto, y como a veces, los astros de alinean para que el resultado sea perfecto.
“Mi perro derramó ácido en la camiseta y este es el resultado del accidente”
“Un diseño en un huevo que se agrietó mientras estaba en el tinte y el resultado fue sorprendentemente bueno”
“No tiene nada que ver con el color de pelo que quería, pero estoy encantada con el resultado”
“Puse los frijoles en remojo durante un día y mirad el resultado”
“Olvidé las tijeras sobre la mesa después de estar trabajando con pintura. Me encantan y quiero sacar una idea comercial de esto”
“Puse accidentalmente una tabla de cortar de plástico en el horno y mirad lo que sucedió, un bosque de setas”
“El niño quería un suéter rojo, pero yo no tenía suficiente hilo así que hubo que tirar de restos y este fue el resultado”
“Esta toalla, accidentalmente decolorada parece un cuadro de dos personas besándose”
“Olvidé cosechar las remolachas y accidentalmente pasaron el invierno en la tierra. Os pongo al lado una gallina para que podáis comparar”
“Mezclé arcilla y salió este cuadro de un océano”
“El resultado de esta taza decorada a mano es totalmente accidental, nada está como había pensado”
“Accidentalmente lavé y sequé un cuaderno, el resultado es maravilloso”
“Mojé unos Skittles y fueron decolorando poco a poco”
“Hice una foto panorámica y así quedó el coche verde”
“El reloj de la sala de servidores se rompió y quedó una obra que podría haber firmado el mismísimo Dalí”
Un cuadro que hice al azar, casi a ciegas, y este fue el resultado
