Cuando nos toca vivir un momento vergonzoso todos pensamos eso de “Tierra trágame”, queremos olvidarlo para siempre, pero, cuando logras verlo en retrospectiva, con el paso del tiempo, te puedes dar cuenta de que también tiene un lado muy divertido, y es que con el tiempo todo mejora. Eso fue lo que hicieron algunos usuarios de Internet al compartir los momentos más incómodos que han vivido pero de los que todos sobrevivieron:
Hoy, he olvidado los calcetines en el gimnasio del instituto, cuando he vuelto para recuperarlos me han dicho que estarían en objetos perdidos así que me he dirigido hacia allí. Para demostrar que eran míos he tenido que dejar que el conserje me oliera los pies.
Hace tiempo, estaba con unos amigos y salió el tema de que me estoy vacunando. Cuando uno me preguntó por qué, le dije que soy alérgica al polvo. «¡Ay coño, por eso sigues siendo virgen!» fue lo que me contestó. No le falta razón.
Hoy, mi profesora de física y química me ha dicho, palabras textuales: «tú que eres de letras, no hace falta ni que estudies para el examen. Total, vas a acabar o en un McDonals o muerta de hambre». Gracias por tu ánimo, «profesora».
Hace tiempo, cuando murió mi padre, en el funeral apareció una señora con sus tres hijos ya mayores y todo el mundo les daba el pésame a ellos. Descubrí a mis 6 años, que esa señora era su verdadera mujer, y nosotros (mi madre y yo), éramos la segunda familia secreta.
Hoy, mientras cuidaba a mi sobrina de tres años, escuché que le decía a su muñeca «no puedo matar a la tía Laura porque ella es la única que me compra chocolate». Después me miró fijamente y se fue a la otra habitación. Estoy bastante acojonada, creo que tardaré un tiempo en volver a ofrecerme para cuidarla.
Hace unos meses, me robaron la moto. Estaba reventada, le sonaba todo, soltaba aceite y el cojín estaba roto. Pero le tenía mucho cariño. Puse la denuncia y la di por perdida. Hace una semana la policía la recuperó. Está como nueva. Gracias ladrón.
La semana pasada, una amiga me dijo, y cito textualmente: «No sabes lo mal que lo pasé en secundaria con mis compañeras, se metían conmigo por ser delgada, rubia, usar una 95 y gustarle a todos los chicos, incluso los que tenían novia. Qué fácil debe ser para ti, eres así tan… pasable». Gracias.
Hace tiempo, me arreglé un día y como no lo hago frecuentemente, mi hermana me dijo «Qué guapa te has puesto, pareces la amiga pringada de la Barbie».
Hoy, abrí el cajón de la mesita de noche de mi madre. Os recomiendo que no lo hagáis, podéis encontrar el vibrador de vuestra madre.
Hace unos meses, empecé a fumar tabaco de liar porque era más barato. Un día, camino al trabajo, me paró la policía mientras liaba uno pensando que llevaría algo más que tabaco. Soy profesor particular en una academia, mi imagen es buena. Le expliqué a los padres por qué llegué tarde. No me creyeron. La academia me despidió por fumar porros. Nunca los he probado.
Hoy, soy una de esas chicas que promocionan ofertas de marcas de tabaco. Una chica de unos 20 años ha pasado por mi puesto y me ha preguntado: «¿Cómo te sientes induciendo a la gente a matarse?». Estoy considerando seriamente dejar el trabajo.
Hoy, he cogido el bus para ir a mi casa y me he encontrado con una chica muy atractiva la cual no paraba de mirarme. Apunté mi instagram en un cacho de papel y me lo metí en el bolsillo. Cuando llegó mi parada, disimuladamente se lo dejé en sus manos y sin mirarla me fui. Cuando he llegado a mi casa, al mirar en el bolsillo estaba el papel. Le he tirado una chuleta que tenía en el bolsillo.
Las anécdotas son de la web ascodevida